por Fernando Serra, socio del CIHF
Un 22 de diciembre de 1974, hace 50 años, San Lorenzo cerraba un ciclo de 4 campeonatos en siete años, ganando el Nacional de aquella temporada. El Metropolitano de 1968 y el Metro y Nacional de 1972 fueron los otros logros que conquistaron varios de los jugadores que estuvieron de principio a fin.
Este torneo Nacional inauguró el sistema de 4 zonas, siendo por entonces el de mayor cantidad de participantes: 36 en total, divididos en 9 equipos por sección y con dos interzonales por fecha. Se jugó a “ida y vuelta”, y los dos primeros de cada zona lograron el derecho a disputar el título.
A San Lorenzo le tocó la zona C, donde los rivales de riesgo, a priori, eran Racing Club y Ferro Carril Oeste, éste conducido por Victorio Spinetto y con un gran plantel, siendo protagonista del Metro jugado en la primera parte del año. La zona la completaban Chacarita Juniors, un viejo conocido del interior como San Martín de Tucumán y cuatro debutantes en estas competencias: Atlético Regina de Río Negro, Aldosivi de Mar del Plata, Deportivo Mandiyú de Corrientes y Godoy Cruz de Mendoza.
El plantel era conducido por Osvaldo Zubeldía, de quién no habría mucho para agregar, con un prestigio obtenido en Estudiantes de La Plata en los años 60 y que lo ponía entre los técnicos más capaces de la época. No obstante, el Metropolitano del “Ciclón” fue muy irregular.
La zona la ganó con cierta suficiencia, aunque Ferro, uno de sus vencedores, quedó segundo a un punto. Solo dos derrotas sufrió el equipo en esta primera fase: justamente ante el club de Caballito y contra Huracán en el interzonal de la fecha 5, en Parque de los Patricios. La campaña se completó con 11 victorias (varias por amplio marcador) y 5 empates.
En la fase final, en un octogonal que se jugó bajo el formato de todos contra todos y en estadios neutrales, el azulgrana fue otra vez protagonista de principio a fin. Inició el petit torneo (como solía denominárselo) con dos victorias, ante Newell’s y Boca Juniors. En la siguiente jornada tuvo su única derrota (y tercera en todo el torneo) ante Independiente, que llegaba de ser campeón de América; luego venció a Talleres de Córdoba, de sorpresiva campaña e igualó con Rosario Central en el Parque Independencia. En la sexta fecha, el partido ante Vélez Sarsfield en la Bombonera resultó clave para la definición, ya que el elenco de Liniers estaba un punto arriba en las posiciones. Sobre el final del encuentro, el Gringo Scotta desniveló el marcador y dejo el título servido.
La última fecha se disputó en el estadio Amalfitani, y el rival, Ferro Carril Oeste, no tenía chances de coronar. Sobre el final del primer tiempo Arregui puso en ventaja al Verdolaga y tras cartón, Olguín desvió un penal que hubiera significado el empate. El segundo tiempo fue distinto, ya que San Lorenzo revirtió el resultado con tantos de Scotta, Cocco y Ortiz. El resultado final fue 3 a 2. La noche de ese domingo de gloria, del que se cumplen 50 años, fue la última en muchos años y terminó con corridas y gases lacrimógenos que empañaron en cierta forma el festejo.
Ese plantel contaba con grandes jugadores. Tanto Villar, Veglio, Cocco, Telch e Irusta lograban su cuarta estrella con la misma camiseta, en tanto Glaría, Olguín, Piris (llegó para el Nacional de 1972), Espósito, Ortiz, García Ameijenda, Enrique Chazarreta y Scotta ya habían “campeonado” en 1972 por duplicado. Solo Beltrán y Anhielo eran los nuevos del equipo. Ricardo Rezza emigró a España con el certamen iniciado.