Marcelo Gallardo y Medio Oriente: análisis sobre su nueva apuesta deportiva

por Ignacio Titimoli, socio del CIHF

Marcelo Gallardo se ha decidido: después de tantos rumores, tantas habladurías, el ex mandamás riverplatense continuará su carrera en Arabia Saudita, dirigiendo al Al-Ittihad. Su vuelta al ruedo se dará el viernes 24 de noviembre, después de 396 días, tras aquella última victoria contra Racing el 23 de octubre de 2022, que habilitó el campeonato a Boca. Atrás quedaron las lágrimas de todos los fanáticos de River -que vieron ponerle coto a un ciclo inigualable, como pocos en su rica historia- y la mirada atávica sobre aquel “ha sido una historia hermosísima” que Gallardo despachó en su conferencia de despedida a la altura del ciclo que acababa.

Gallardo y su equipo llegarán a la ciudad de Yeda, costera del Mar Rojo. Yeda es la segunda ciudad más grande de Arabia Saudita, con más de 4 millones y medio de habitantes y con una temperatura anual promedio de 28 grados, siempre según Wikipedia. Y también llegarán al encuentro de Anmar bin Abdullah Al-Haili, su presidente, y de Abdel Wahhab bin Ahmed Abed, su CEO. Según una reciente investigación de Play the Game (una iniciativa privada que promueve la ética y la transparencia deportiva comandada desde el Instituto Danés de Estudios del Deporte que desarrolló un archivo esquematizado con 795 posiciones en 156 entidades saudíes vinculadas al mundo del deporte), quienes pagarán el salario del Muñeco y su equipo no ocupan otros cargos directivos en entidades deportivas más allá del mentado. En el mismo documento puede observarse que la fuente de ingresos del equipo por sponsoreo está sustentada en una única entidad: el Fondo de Inversión Pública. Este fondo, a través de cinco de sus subsidiarias (Jeddah Central Development Company, ROSHN, SRJ Sports Investments, The National Security Services Company (SAFE) y The Saudi Real Estate Refinance Company (SRC)) y una participación adicional directa, financian otras diez disciplinas deportivas, que van desde el Golf a las Artes Marciales Mixtas (MMA).

Gallardo se encontró con un plantel variado, con predominancia de jugadores saudíes, aunque con algunas figuras remarcables, como los franceses Benzemá y Kanté y el brasileño Fabinho. Dos de ellos provienen de la NBA del fútbol, como es la Premier League, y el otro proviene del Real Madrid, después de haberlo ganado todo. Si bien estos tres jugadores -los más reconocidos, los más nombrados- parecen haber llegado en una etapa de esplendor lúgubre, nadie puede negar su relevancia ni el salto cualitativo que aportan a la plantilla que dirigirá Gallardo.

Plantilla que tiene un promedio de 27 años, lo cual es menos que los 29 que ahora conduce Martín Demichelis en su amado River Plate, por ejemplo; y que también son menores a los 28 que tienen sus rivales directos en la competición: Al-Nasr (donde juegan Cristiano Ronaldo y Sadio Mané) y Al-Hilal (donde juega Neymar, ahora lesionado).

Otro dato destacable es quién será el arquero de su nuevo equipo: Marcelo Grohe, el brasileño que atajó en el famoso partido de Copa Libertadores 2018 Gremio-River, ahora defenderá la valla de su equipo. Aquel partido quedó grabado en la memoria de los hinchas de River porque fue la antesala a la final contra Boca y tuvo una definición agónica con un penal convertido por Gonzalo Martínez bajo un diluvio que alentaba la épica y el heroísmo.

Según Transfermarkt, la valuación de su equipo es de 114,4 millones de euros. Para sentar referencias, esto es un 18,9% más alto que la actual cotización del plantel de River, pero un 59,1 y un 104,3% más bajo que la de Al-Nasr y Al-Hilal, respectivamente. Es decir, si bien cuenta con un plantel donde resuenan algunos nombres importantes como el de Benzemá, en el torneo económico Gallardo empezará corriendo desde atrás y tendrá el desafío de revalorizar su plantilla, más allá de los objetivos deportivos.

Su jugador MVP es Fabinho, con una cotización de 38 millones de euros; y, paradójicamente, su segundo jugador más valuado es Luiz Felipe, un defensor brasileño de 26 años que, al igual que Karim Benzemá, cotiza en 15 millones de euros. Además, 21 de los 32 jugadores son saudíes, 5 son brasileños, 2 son franceses y los cuatro restantes se dividen entre un egipcio, un portugués, un marroquí y un guineano.

Al-Ittihad marcha quinto en la liga, con 24 puntos, a once del puntero Al-Hilal, que tiene 35. Su racha en los últimos cinco partidos no ha sido de las mejores: ganó uno, perdió dos y empató otros dos. Además de lo que comúnmente conocemos como la “liga local”, Gallardo y su equipo deberán afrontar de aquí a fin de año sus compromisos por la Champions League Asiática y también su participación en el Mundial de Clubes (al que accedieron por haber sido campeones del último torneo local). En el Mundial de Clubes, tendrán la posibilidad de enfrentarse a Fluminense (campeón de Copa Libertadores, en semifinales) y a Manchester City (campeón de Champions League, en la final) siempre y cuando logren imponerse a sus dos rivales previos: Auckland City, por la fase preliminar del campeonato, y Al-Ahly de Egipto, en cuartos de final.

De conseguir resultados auspiciosos en el Mundial de Clubes, sus compromisos por la Liga Profesional Saudí y por la King’s Cup (Copa del Rey de Campeones) quedarán postergados.

Yeda es la principal puerta de entrada a La Meca, la ciudad más sagrada del Islam. Las puertas ya están abiertas de par en par para recibir al Rey Napoleón, que ahora buscará profundizar su legado futbolístico en Medio Oriente.

Deja un comentario