João Lanzoni “Lanzoninho” y su tarde inolvidable

por Ricardo Gorosito, socio del CIHF

 

Para 1960, la directiva de Independiente decidió una importante mejora en su estadio de Alsina y Cordero. Se construyó una nueva visera en la tribuna lateral oeste, se bajó el nivel del campo de juego y se agregaron escalones en las tribunas cabeceras. Las obras se iniciaron en mayo de ese año y duraron dieciséis meses, lapso en que los rojos utilizaron la cancha de Racing. Por esa razón no pudo celebrar en su estadio el título que volvió a conseguir luego de doce años. La  inauguración de las obras tuvo lugar el 20 de agosto de 1961, día en que pasó a ser el “Estadio de la Doble visera”. Tarde plena de sol. El adversario iba a ser nada menos que Racing, puntero invicto del campeonato que en definitiva obtendría. Lleno total en las tribunas y un ambiente digno del cásico de Avellaneda.

La campaña del local, si bien se encontraba entre los primeros de la tabla, estaba lejos de emular lo hecho en la temporada anterior. Las nuevas caras de 1961 fueron el centro delantero de Banfield, Luis Eduardo Suárez, el arquero Rodger Bernardico de Peñarol y el delantero de Olimpia, Pedro Cabral, que llegaba con muy buenos antecedentes, pero que apenas jugara nueve partidos y dejara una pobre imagen, destacándose solo por su mal carácter que le costó alguna expulsión. Hubo algunas más, pero fueron intrascendentes y ninguna llegó a lucirse. Entre ellas estaba un delantero procedente de Corinthians, João Lanzoni (o Lanzone), apodado en su país “Lanzoninho”, aunque aquí no se lo conoció por ese apodo.

Lanzoninho… sua casa era o Coritiba | TARDES DE PACAEMBU

A poco de debutar, las expectativas se fueron esfumando. No pasaba de un jugador mediocre que no superaba a los que ya estaban en el club, especialmente a un puntero que debutara ese mismo año y que daría que hablar poco después, el gran Raúl Emilio Bernao.

No obstante, el calvo brasileño tuvo su tarde de gloria. Y fue justamente en aquel partido ante Racing, cuando se inauguraron las nuevas obras del estadio. Fue el artífice de la victoria ante el tradicional vecino. Desde el momento en que el juez Brozzi dio la orden, Independiente salió al ataque. Apenas se habían jugado 7 minutos cuando el héroe de la tarde, enfiló hacia el arco de las vías y con un remate que previamente dio en la parte interna del travesaño anotó el primer gol con el que terminó la etapa. Pero lo mejor estaba reservado para la segunda. A los 54’, el brasileño protagonizó una jugada increíble. Se escapó por la izquierda eludiendo adversarios, cuando al llegar al área se cayó, pero se levantó ante la pasividad de la defensa racinguista y encarando a Ataúlfo Sánchez, lo venció nuevamente. El delirio se apoderó de la parcialidad local. A partir de allí todo fue de Independiente, quien señaló dos nuevos goles por intermedio de Abeledo y Suárez para completar un 4 a 0 histórico.

Para Lanzoni fue su tarde inolvidable. La única en su breve y poco feliz paso por los Diablos Rojos. De escasas dotes futbolísticas, lento, sin la pujanza que debe tener un delantero, al final de la temporada se volvió a su país. Llegó procedente del Club Juventus de São Paulo ya con treinta años y luego vistió las casacas de Palmeiras, Corinthians, Sport Boys de Perú y los colombianos Millonarios y América de Cali.

Por Independiente jugó 21 partidos y señaló apenas 4 goles. Los dos restantes se los marcó a Rosario Central y Vélez en fechas posteriores, pero se lo recuerda por aquel de la soleada tarde de 1961.

Nació en Curitiba el 22 de agosto de 1930 y falleció en Paranaguá (Brasil) el 13 de septiembre de 2014. Esa derrota para Racing fue apenas un breve alto en la formidable campaña que lo consagró campeón algunas fechas antes por la holgada diferencia que había sacado a sus más inmediatos adversarios. Un equipo que tuvo en Rubén Sosa, Norberto Anido, Federico Sacchi, Anacleto Peano, Juan José Pizzuti y al inolvidable Oreste Osmar Corbatta a sus figuras más rutilantes. Independiente finalmente ocupó un mediocre sexto puesto, pero esa victoria fue inolvidable para su hinchada.

Estos fueron los protagonistas de aquella jornada:

Domingo 20 de Agosto de 1961 – 14ª. fecha

INDEPENDIENTE 4 – RACING CLUB 0
Cancha: Independiente
Juez: Juan Brozzi

Independiente: Rodger Bernardico; Rubén Marino Navarro, Tomás Rolan; Roberto Oscar Ferreiro, Jorge Entrerríos, Jorge Alberto Maldonado; Raúl Emilio Bernao, Ramón Gregorio Abeledo, Luis Eduardo Suárez, João Lanzoni, Edgardo Jorge D’Ascenzo – DT: Oswaldo Brandao.

Racing Club: Ataúlfo Sánchez; Norberto Anido, Juan Carlos Mesías; Roberto Blanco, Anacleto Peano, Néstor Sanguinetti; Oreste Osmar Corbatta, Juan José Pizzuti, Pedro Mansilla, Rubén Sosa, Carlos Borges – DT: Saúl Ongaro.

Goles: 7’, 54’ J. Lanzoni (I); 56’ R. Abeledo (I); 73’ L.Suárez (I).

 

Deja un comentario